El pasado 18 de septiembre se inauguró con “bombo y Platillo” el Centro de Justicia en el Espinal, ubicado en el Istmo con la finalidad de atender a 213 mil habitantes, pero resulta que hasta la fecha carecen de luz eléctrica. Abogados litigantes calificaron como “una burla” que tan lujoso edificio sea ejemplo de corrupción y miseria política.
La inauguración contó con la presencia del gobernador Alejandro
Murat Hinojosa; Horacio Sosa Villavicencio, presidente de la JUCOPO, el Fical
General Rubén Vasconcélos y Eduardo Pinacho como presidente del Consejo de la
Judicatura del Estado.
La inversión fue de 62.57 millones de pesos para albergar
Juzgados de Control, Penal, Primero y Segundo de lo Familiar; el Primero de lo
Civil para resolver asuntos de Juchitán, Matías Romero, Tehuantepec y Salina
Cruz. El edificio también es ocupado por personal de la Secretaría de Seguridad
Pública, Fiscalía General del Estado y Defensoría Pública.
El colmo de los hechos, es que los políticos y funcionarios de primer nivel han quedad en total ridículo, porque la construcción es un elefante blanco que sólo sirve para tomarse fotos y presumirlas en redes sociales.
La Cuarta Transformación no ha llegado a Oaxaca, pero que
tal los discursos para presumir resultados que en realidad son una burla más
para los oaxaqueños que confiaron en un Cambio para el país.
Los ciudadanos piden una explicación para entender porqué
tan lujoso edificio carece de energía eléctrica o además existen otros
desperfectos que pongan en peligro a los trabajadores.
Pero qué pasa en Oaxaca?
Empezó el “año de Hidalgo”...
