Carlos Ramírez.- Como llegó a la gubernatura sin realmente buscarla, el mandatario sinaloense Quirino Ordaz acaba de dar un paso audaz hacia una verdadera reforma no sólo de la política sino del poder: abaratar la política, disminuir la parafernalia de los tiempos de campaña y reducir dinero a partidos. Las competencias electorales se han salido del control institucional y han rebasado a las autoridades encargadas de poner orden en campañas. Los procesos de votaciones en el Estado de México, Coahuila, Nayarit y Veracruz hicieron trizas …