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Canela Fina
Columna por: Rubén Cortés

INE

Una verdad de los hechos es que el INE le negó el registro a México Libre, y su decisión fue festejada por el presidente, el mismo presidente que informó después que, si el INE hubiera otorgado el registro, habría sido el final del INE. 



Otra verdad de los hechos es que el INE le negó el registro a México Libre, cuya dirigente es Margarita Zavala, esposa del expresidente Felipe Calderón, el principal promotor de México Libre y a quien el presidente señala como su adversario político número uno.

Después se conocerá la verdad jurídica pero, mientras, lo que hay son estas dos inexorables verdades de los hechos. Y también que, pese a todo, para el presidente el INE sigue siendo despreciable: “Los del INE están totalmente desacreditados”.

Aunque todavía queda otra verdad de los hechos: el INE sí concedió el registro como partido a un grandísimo aliado del presidente, que ahora se llama Encuentro Solidario y, en 2018, Encuentro Social, cuando acompañó al presidente en las elecciones.

Una historia singular la de este socio del presidente, porque el TEPJF le decretó la pérdida del registro, ya que en 2018 no alcanzó la votación mínima del tres por ciento para mantenerlo. Sin embargo, se inscribió otra vez ante el INE… con las mismas siglas.

El nuevo PES también es presidido por su propietario de entonces, Hugo Eric Flores, quien solo aportó un millón de votos al presidente en 2018, pero le sacó una lasca tremenda: 56 diputados y seis senadores: es una fuerza política en la Cámara de Diputados.

¿Que fue una lasca tremenda? Ah, pues todavía le sacó una mejor: a pesar de que perdió el registro como partido, el PES siguió ganando dinero público a puños en 2018, con un total de 62.7 millones de pesos.

Un dinero público que el viejo PES pudo usar a placer para armar el nuevo PES. Además de que el PES viejo (al menos hasta 2017) nunca pagó siquiera un centavo de impuestos, según la solicitud de información al INE número 2236000025017.

Hasta 2017, el partido coaligado del presidente debía la suma de 57 millones de pesos en impuestos, aunque había recibido del erario más de 606 millones. “Vamos a meter a los evasores a la cárcel”, prometió el actual gobierno. En todo caso, no al dueño del PES.

Sí: una historia singular la del PES. Porque no es sólo escudero del presidente en la política. Lo es también en el área moral. De confesión evangélica, está ayudando al gobierno a redactar la llamada Constitución Moral para “enfrentar la codicia y el odio”.

Pues así fue todo: el INE le dio el registro a un amigo del presidente y se lo negó al gran enemigo del presidente.