Ricardo Alemán.-
Cuando nos referimos a una presunta complicidad entre el
gobierno de López Obrador y el Cártel de “El Chapo”, no hablamos de oídas o de
una mera ocurrencia.
En efecto, no existe un documento o un video que puedan
confirmar tal hipótesis. Sin embargo, si tiene cola de pato, patas de pato y
grazna como pato, tenemos derecho a suponer que se trata de un pato.
Y es que, en los hechos, son muchas las casualidades que,
por esa misma razón, apuntan a una presunta complicidad entre el gobierno de
López Obrador y el mayor narcotraficante mexicano.
Pero vamos por partes.
Apenas el miércoles pasado se reportó la fuga de tres
reos de alta peligrosidad del Reclusorio Sur, de la Ciudad de México; los tres
pertenecen al Cártel de “El Chapo”.
Hasta hoy muchos especulaban sobre el “modus operandi”
utilizado por los reclusos para el escape, lo que en realidad poco importa,
cuando todos saben que los reclusorios mexicanos están entre los mayores centros
de corrupción, en donde no ha llegado y no llegará la “Honestidad Valiente”.
Lo interesante del asunto, en todo caso, es que los
reclusorios Oriente y Sur de la capital del país son controlados por el llamado
Cártel de Tláhuac, grupo criminal aliado del Cártel de “El Chapo”.
¿Y qué tiene de particular esa alianza criminal?
Resulta que el Cártel de Tláhuac, como saben, lo fundó
Jesús Pérez Luna, motejado como “El Ojos”, quien fue abatido por la Marina
Armada en julio de 2017. Sin embargo, a la muerte del patriarca, el grupo
criminal siguió en manos de sus hijos, “El Micki” o “El MK” y “El Felipillo”.
Los dos jóvenes cumplen condenas en prisión y –desde el
penal–, el primero controla el Reclusorio Oriente, mientras que el segundo
mantiene a raya el Reclusorio Sur.
Y, precisamente del Reclusorio Sur, el miércoles pasado
escaparon tres integrantes del Cártel de “El Chapo”, entre ellos Víctor Manuel
Félix Beltrán, alias “El Vic”, operador financiero de toda la familia de “El
Chapo” Guzmán.
Está claro que si el Reclusorio Sur lo tiene bajo control
el hijo menor de “El Ojos” –motejado como “El Felipillo”–, la fuga debió ser
planeada y operada por quienes controlan el penal; los aliados cárteles de
“Tláhuac” y “El Chapo”.
Sin embargo, la verdadera novedad de la historia es que
mucho dinero salido de los cárteles de “Tláhuac” y de “El Chapo”, habría
financiado campañas políticas de Morena.
¿Morena aliado con el narco?
En efecto, resulta que a la llegada de Morena a Tláhuac,
Xochimilco e Iztapalapa el jefe del Cártel de Tláhuac –“El Ojos”–, financió con
todo el dinero necesario las campañas de Rigoberto Salgado y Abelino Méndez,
entre otros, a puestos de elección popular, a cambio de protección.
En pocas palabras, el crimen organizado financió a Morena
en regiones clave de la CDMX; Tláhuac, Xochimilco e Iztapalapa.
Lo simpático del tema es que al día de hoy, el exalcalde
de Morena, Rigoberto Salgado es diputado al Congreso de la Ciudad de México
(CDMX), mientras que el también exalcalde, Abelino Méndez, hoy también se
desempeña como subsecretario de Alcaldías y Reordenamiento de la Vía Pública,
en la secretaria de gobierno de Claudia Sheimbaum.
¿Nada supo de la fuga la jefa de gobierno de CDMX, si
duerme con los enemigos en casa?
Por otro lado, es ampliamente conocida la relación de
Víctor Manuel Félix Beltrán “El Vic”, con “El Chapito” Ovidio Guzmán. Más que
amigos son parte fundamental del negocio criminal.
Por eso resulta curioso que, a tres meses de su
extradición a Estados Unidos, Félix Beltrán cuenta con todas las facilidades
para escapar del Reclusorio Sur.
Al “Chapito” lo dejó escapar el gobierno de López
Obrador, en tanto que al operador financiero de “El Chapo” le ayudó a escapar
el gobierno de Claudia Sheinbaum, con la participación de la poderosa alianza
entre los cárteles de “Tláhuac” y de “El Chapo”.
Por lo pronto,
vale recordar el tuit que ante la fuga de “El Chapo” –el 14 de julio de 2015–,
mandó el entonces líder opositor Andrés Manuel López Obrador: “Si cuando menos
no renuncia el gabinete de seguridad, va a quedar la idea de que hubo
complicidad al más alto nivel en la fuga del Chapo”
¿Existe complicidad, al más alto nivel, del gobierno de
AMLO con el cártel de “El Chapo”?
Al tiempo.