José Ureña
Ricardo Anaya lee con fruición las notas sobre Edgar Veytia.
Su aprehensión tiene un mayor superior al de la justicia de
Estados Unidos, cuyas autoridades antidrogas dieron seguimiento durante mucho
tiempo hasta sustentar la orden de captura.
Ayer dimos avances de la importancia de este fiscal de todas
las confianzas del gobernador Roberto Sandoval, al grado de ser el vehículo
financiero hacia Jaime Rodríguez el Bronco.
¿Con dinero del erario de Nayarit o de origen oscuro?
Tal vez no lo sepamos, pues las autoridades mexicanas no
tienen ninguna averiguación abierta en contra del Diablo Veytia, y menos para
seguir la ruta del dinero del gobierno de Sandoval.
Lo único loable hasta ahora es el reconocimiento del Bronco
de su gran amistad con el Diablo –“es mi amigo, pero no puedo hablar de sus
acciones”-, quien a la vez era su consejero en seguridad pública.
O sea, las redes de influencia, protección y trasiego -creen
ahora los panistas- de Veytia se extienden por tierras neoleonesas hasta la
frontera con Estados Unidos, y eso lo veremos en los cargos de los fiscales de
Nueva York.
DESVÍOS Y FORTUNAS NUNCA VISTOS
El mayor ganador, decíamos al comienzo, será Ricardo Anaya.
Tiene elementos.
Desde hace tiempo investiga los enriquecimientos y desvíos
de recursos del gobernador Roberto Sandoval, como adelantamos aquí el 1 de
diciembre en la columna:
-Otro gobernador en problemas: el PAN va contra Roberto
Sandoval.
¿Y qué tiene Anaya?
Información, como lo anunciamos entonces: lista de muchas y
grandes propiedades en México y el extranjero con cuya difusión el PAN y PRD
quieren hacer gobernador al júnior Alejandro Echevarría.
Una fortuna, aseguran quienes corroboran cuentas, ubicaciones,
domicilios, escrituras, orígenes del dinero, prestanombres y demás.
Dice un directivo panista:
-Sus riquezas y cochinadas, cuando se conozcan, harán
palidecer las de Roberto Borge y los Duarte, César y Javier.
Puede ser cierto si el Diablo Veytia sirve de pista cuando
Estados Unidos pide congelarle propiedades por 250 millones de dólares.
Les cayó del cielo y pone en riesgo la campaña del priista
Manuel Cota.
O tal vez sea la oportunidad de Cota para distanciarse y
enfrentar a su hoy enemigo Sandoval, cuya campaña dirigió.
La selección, Televisa y TV Azteca
1. Viene un cambio en las televisoras y las transmisiones de
la Selección Nacional de futbol.
El punto de partida fueron los partidos de Costa Rica y
Trinidad y Tobago, cuando, según Ibope-Nielsen, el duopolio Televisa-TV Azteca
tuvo una audiencia de seis millones y medio de hogares y centros de reunión.
De acuerdo a la misma fuente, el consorcio de Emilio
Azcárraga superó al de Ricardo Salinas, dos a uno.
Ahora las dos firmas buscan cómo apuntalar sus niveles de
audiencia para evitar la predominancia de los medios digitales.
Esperemos sus nuevas estrategias.
2. El priista Miguel Riquelme ha iniciado una campaña para
dejar atrás la grilla y salirse del pleito Moreira vs. Moreira y Humberto vs.
Rubén.
Su eslogan lo dice para anunciar el fin del moreirato:
“Menos política y más carácter”.