Tras la destrucción de plantas sembradas en las jardineras del zócalo y la Alameda de León por integrantes de organizaciones sociales, durante la madrugada y horas de esta mañana personal de
la Coordinación Ejecutiva del Centro Histórico y Servicios Municipales trabajaron para reparar los daños causados.
Pero el trabajo más peligroso, titánico tétrico y pudiera decirse de alto impacto, lo realizaron valerosos hombres y que hoy demostraron una vez más, ser los heroicos BOMBEROS.
Y es que estos valientes hombres descargaron los baños portátiles instalados en la Alameda de León, en dónde los manifestantes descargaron al menos dos toneladas de residuos sólidos.
Ante el riesgo de una explosión por la acumulación de gases por tanto producto fecal en esos baños portátiles, los bomberos diseñaron un operativo para subirlos con toda su mortífera carga y llevarlos a un lugar apartado de la bella y Verde Antequera.
Hasta hace unos momentos, los valerosos e intrépidos bomberos, utilizando un Carro/Tanque con suficiente agua limpiaban el piso en dónde algunos manifestantes realizaron sus necesidades fisiológicas haciendo que el aroma fuera explosivo.
Mientras los bomberos realizaban está arriesgada maniobra de limpieza, muchas personas y taxistas disfrutaban de sus tortas de tamal con su respectivo champurrado.
