La victoria de Andrés Manuel López Obrador el primero de
julio de 2018 se debió al hartazgo de la población por los excesos de
corrupción del Partido Revolucionario Institucional y la falta de capacidad del
PAN para expulsar definitivamente al PRI de Los Pinos.
Los mexicanos hartos del PRI regalaron su voto al
personaje “opositor” al sistema político y contra la abundante corrupción
tricolor explotada por más de 70 años en el poder.
AMLO se convirtió en el hombre “antisistema” incluyendo acuerdos
del Foro de Sao Paulo celebrado en Brasil en 1990 para implementar el Socialismo
del Siglo XXI en Latinoamérica.
La estrategia electoral utilizada fue el “Populismo”, es
decir, la polarización de la sociedad al estilo marxista: ricos contra pobres,
obreros contra patrones, chairos contra fifís y ahora mujeres contra hombres
con la promoción de la ideología de género.
Otro compromiso del Socialismo del Siglo XXI contempla,
además de legalizar las uniones homosexuales, la legalización del aborto.

Esto “prendió” a los grupos próvida, a los líderes
religiosos que pese a sus diferencias teológicas se unieron para defender la
vida desde el momento de la concepción.
Según nos comentan, los diputados de MORENA han recibido
las opiniones jurídicas para recapacitar sobre la reforma a favor del aborto y
sus consecuencias. En primer lugar la promoción de una controversia constitucional
además de acudir a tratados internacionales de los cuales México ha firmado
para respetar la vida.
Sin embargo, los diputados de MORENA no han medido las consecuencias
políticas: una sociedad mayormente conservadora que representa más del 90 por ciento
de los electores.
Por ejemplo, el INEGI sostiene que los resultados del
censo en 2010, la población católica en México es de 89.3 por ciento; protestantes
y evangélicas ocho por ciento y biblias evangélicas diferentes 2.5 por ciento.
Esto quiere decir que MORENA recibirá la desaprobación
social que se reflejará en las urnas para el año 2021, donde se renovarán Ayuntamientos,
Cámaras legislativas locales y federales.
El sistema democrático contempla el sentir de la mayoría,
los gobernantes actúan a favor de la mayoría y se realizan políticas públicas
para beneficiar a las mayorías. Las minorías se sujetan a lo que dicte la
mayoría.
EL panorama político se complica para MORENA, cumplir los
principios del Foro de Sao Paulo en una sociedad occidental.
Bueno, a fin de cuentas es el objetivo del marxismo: destruir
todo vestigio occidental (cristiano) para imponer un nuevo régimen social, cultural,
legal, religioso.
Hoy, la mayoría ha despertado y ha salido a las calles
para manifestarse, despertaron del sueño aletargado por Andrés Manuel López
Obrador y ven la realidad que significa ser gobernado por MORENA.
Cobrarán factura en 2021…